La migración de niñas y niños centroamericanos de cero a 17 años de edad se incrementó en 132 por ciento en el primer semestre del año, ante la modalidad de migrar en familia, en comparación con el mismo periodo de 2018.

El Instituto Nacional de Migración (INM) y la Secretaría de Gobernación reconocieron que ese fenómeno está relacionado con el incremento en el flujo de migrantes procedentes de Centroamérica, que pasan por territorio nacional en grupos de familias con el fin de llegar a Estados Unidos.

De acuerdo con cifras preliminares, que de manera conjunta informaron, de enero a junio de este año las autoridades migratorias han atendido a más de 33 mil 122 niñas, niños y adolescentes, cuando en el mismo semestre de 2018 la cifra de infantes presentados fue de 14 mil.

De ese total 24 mil 597 estaban acompañados, mientras ocho mil 525 no acompañados. Además este año la cifra de las niñas migrantes casi se triplicó, al pasar de cuatro mil 936 a 13 mil 671, y la de los niños se duplicó al pasar de nueve mil 343 a 19 mil 541.

Respecto a su lugar de origen, los infantes provienen de Honduras, 17 mil 034; Guatemala, 10 mil 069; El Salvador, tres mil 745; y de otras nacionalidades han ingresado al país dos mil 274.