La procuraduría de la Ciudad de México dio a conocer que el sacerdote Francisco Javier asesinó al estudiante Leonardo Avendaño en 13 minutos.
Leonardo llegó a la casa del padre a las 23:04 horas del 11 de junio, posteriormente ambos salieron de la casa del párroco, ubicado en la alcaldía de Tlalpan, a las 3:16 de la madrugada y se dirigieron hacia la carretera Picacho-Ajusco para luego trasladarse a la colonia Héroes de 1910 en la misma alcaldía.
Fue en este lugar donde el sacerdote asfixió al estudiante quien no pudo pedir ayuda ni tampoco defenderse.
Luego del asesinato, el padre escondió el cadáver en la cajuela del auto y esperó a que su cómplice pasara por él en otro automóvil.
Por ahora el padre está en prisión preventiva oficiosa en el Reclusorio Norte, mientras que las autoridades buscan a la segunda personas quien ayudó al párroco.